Los colombianos nos caracterizamos por ser personas colaboradoras, si vemos a un compatriota en problemas, ya habrán a su lado al menos dos más intentando ayudarle a solucionarlo, y un ejemplo de ello es Carlos Gómez, un ingeniero químico nacido en Antioquia quien inventó una maquina que se alimenta de energía solar para hacer hielo.
La iniciativa de Gómez nació hace 5 años durante un viaje que hizo a Isla Fuerte en el departamento de Bolívar, un municipio en el cual solo se tiene acceso a energía durante la mitad del día. Los pescadores, por falta de refrigeración y un correcto almacenamiento, perdían su producto, y de paso, el esfuerzo invertido en su trabajo, viéndose obligados a ocupar para el consumo propio y de sus familias alimentos poco frescos.
El grupo de científicos que ha trabajado en este proyecto por aproximadamente quince años, pertenece a la Universidad Nacional de Medellín y comenzó su desarrollo pensando en llevar una solución a lugares sin acceso a energía eléctrica con el fin de conservar alimentos y medicamentos. Sustentado únicamente con energía solar, y sometido constantemente a mejoras, este artefacto busca incrementar la calidad de vida de las personas que habitan en las zonas apartadas de Colombia.
Aunque la técnica de enfriamiento de líquidos por medio del uso de energía solar se conoce hace un tiempo largo, lo innovador del proyecto es que alcanza a enfriar el agua hasta el punto de lograr convertirla en hielo ayudándose de procesos químicos que incluyen el flujo de metanol y carbón activado, componentes que se encuentran encapsulados en condiciones de vacío dentro de estructuras tubulares en la maquina lo cual los hace reutilizables y genera un bajo impacto ambiental.
Actualmente, la máquina puede congelar hasta ocho litros de agua por ciclo y mide cuatro metros de altura por dos de ancho, medidas que, según el equipo de trabajo, buscan reducir a lo largo del tiempo para alcanzar incluso el tamaño de un computador portátil y así facilitar su transporte y accesibilidad a las pequeñas regiones de nuestro país. La «máquina para hacer hielo con el uso de energía solar» se une a las patentes de la UNAL sede Medellín, pero sobre todo, a nuestro orgullo por ser colombianos: personas que lo entregan todo por ayudar a otros.