El mes de Julio trae consigo el inicio de la temporada de avistamientos de ballenas en el Pacífico colombiano, las ballenas jorobadas se acercan a las calurosas aguas del Chocó y departamentos aledaños para parir sus crías cada año, con el fin de alejarse del frío de la Antártida.

Cuna de este evento es el parque natural Nuquí, espacio que presenta la dualidad entre el mar y la selva y al cual acuden cientos de personas cada año para disfrutar en el mes de agosto del Festival de la Migración, donde se realizan actividades culturales y ecológicas basadas en este hermoso suceso natural.

El gran suceso de las ballenas yubartas se extiende hasta noviembre y permite a turistas o habitantes de la zona, conocer estos enormes mamíferos, además de disfrutar de la selva virgen del Chocó.

En la vereda Guachalito, está Nuquí, esta área natural en la que, además de ballenas, se pueden apreciar ranas, aves y disfrutar de baños termales en aguas naturales. En la zona no cuentan con cajeros electrónicos y en uno de los hoteles más conocidos se cultiva la comida ofrecida a los huespedes, un lugar en el cual los visitantes se pueden relajar y disfrutar de la naturaleza alejándose del ruido de las grandes ciudades.

Además de este lugar, las ballenas jorobadas también se pueden ver en otros destinos como Guapi, Buenaventura y Tumaco, áreas del país donde con este llamativo fenómeno natural se fomenta el turismo y la protección de la selva, los mares y los animales que en ellos habitan.

Colombia es sumamente rico en diversidad de flora y fauna, pero sobre todo es un país que cuida sus recursos naturales y eso mueve al mundo.